ASUNCIÓN.- El canciller de Paraguay, Luis
Alberto Castiglioni, expresó el temor de los
miembros del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) ante un
posible resultado en las elecciones europeas de mayo de 2019 que
desacelere las negociaciones del acuerdo con la Unión Europea (UE).
Castiglioni aseguró que el bloque suramericano está "muy pendiente" de
las "voluntades políticas" de los europeos y añadió que seguirán con
interés las elecciones al Parlamento Europeo que se celebrarán en el
bloque comunitario entre el 23 y el 26 de mayo de este año.
"Tememos que, de repente, la conformación de
determinadas mayorías pueda desacelerar, pueda ralentizar el proceso.
Eso es lo que no queremos. No queremos que esto nuevamente tome un ritmo
cansino y nos lleve nuevamente a años y años de postergación", dijo el
canciller paraguayo.
El auge del populismo y de las
opciones electores euroescépticas se presentan en estos comicios como
una de las principales amenazas para la nueva conformación de la
Eurocámara, donde el número de escaños se reducirá de 751 a 705, como
consecuencia de la decisión de Reino Unido de abandonar la UE.
Sin embargo, las conversaciones para firmar un acuerdo de libre
comercio entre los dos bloques están ahora en "una especie de compás de
espera", como lo calificó Castiglioni, tras el cambio de Gobierno en
Brasil y la llegada al poder del ultraderechista Jair Bolsonaro.
"Tengo mucha fe en que el Gobierno del señor Bolsonaro va a apuntar a
llegar a un acuerdo con la UE. Ojalá que antes de abril, ojalá que en
marzo podamos tener los pasos del ansiado acuerdo y la firma", dijo el
canciller paraguayo.
El mandatario brasileño
manifestó este miércoles en Brasilia su intención de concluir
"rápidamente" las negociaciones con la UE.
No
obstante, la UE está a la espera de que Bolsonaro aclare la posición de
su Gobierno de cara a las conversaciones entre ambas partes.
El canciller paraguayo adelantó que el siguiente encuentro entre el Mercosur y la UE podría celebrarse en febrero.
La última ronda negociadora se produjo en diciembre pasado en Uruguay y
se lograron clarificaciones, aunque volvieron a quedar asuntos
pendientes de carácter técnico.
La UE y el Mercosur
(Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay) negocian este acuerdo basado en
tres pilares -el diálogo político, la cooperación y el libre comercio-
desde 2000.
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