JOHANNESBURGO.- La caída general de los precios de las energías
renovables está abriendo una "oportunidad" clave para el desarrollo en
África, algo que el Consejo Mundial de Energía (WEC, siglas en inglés)
insta a aprovechar cuanto antes, explica su secretario general,
Christoph Frei.
"África es una de las regiones más
ricas en recursos renovables. Es el momento de resolver cómo podemos
acelerar algunas de esas oportunidades", resalta Frei, uno de los
líderes que entre hoy y mañana participan en la conferencia Africa
Energy Indaba (la más importante de su tipo en la región) en
Johannesburgo.
El evento -que cuenta con la presencia de expertos
internacionales, empresas y representantes políticos- incidirá
especialmente en temas como la descarbonización, la digitalización y la
descentralización de la producción.
En ese marco,
Frei considera que África atraviesa un momento crucial para subirse a la
ola del abaratamiento de las energías renovables.
Un
campo determinado, según este experto, por tres factores "de urgencia":
la variable puramente "económica", la medioambiental relacionada con
los efectos ocasionados en "el clima" y la necesidad de extender el
"acceso".
No en vano, según la ONU, actualmente hay
1.000 millones de personas en todo el mundo sin acceso a electricidad,
la mayoría en África subsahariana y en zonas rurales.
"La forma más barata y más rápida de entregar energía es, de hecho, la
energía limpia y renovable. La energía solar y la lluvia pueden
competir, o incluso sobrepasar al carbón, algo que en sí mismo es un
argumento económico muy fuerte", indica Frei.
Este
experto remarca que África ofrece, por ejemplo, oportunidades solares
"enormes" en su franja central, mientras que otros lugares como la
República Democrática del Congo (RDC) o Etiopía, destacan por sus
grandes presas hidroeléctricas como las de Inga y las de Renacimiento,
respectivamente.
"África tiene opciones hidráulicas
enormes y lo sabemos desde hace tiempo, mucha gente ha enfatizado en la
necesidad de (trabajar en) esta agenda, pero para ello se necesita
integración regional y grandes inversiones", expone Frei.
"No puedes hacer un proyecto como Inga si no tienes un gran actor al
otro lado, sea un complejo industrial, una ciudad; alguien que va a
pagar a quien paga. De lo contrario, no encontrarás ningún inversor que
quiera poner dinero en un proyecto así", recalca.
Las
alianzas de países africanos por subregiones, como la Comunidad
Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) o la Comunidad para
el Desarrollo de África Meridional (SADC), son claves para impulsar esa
agenda de integración energética.
Sin embargo, Frei
apunta que el aprovechamiento de las renovables puede llegar también en
forma de pequeños emprendimientos que encajan a la perfección con las
necesidades de la población en las áreas rurales más aisladas.
Países como Kenia son un buen ejemplo de esta tendencia, que también
está dando resultados positivos en otros rincones del globo como Nepal o
Bangladés.
Estos proyectos avalan, a su vez, una de
las conclusiones del principal estudio elaborado por el WEC -con datos
de la última década- para esta edición de Africa Energy Indaba: que las
renovables, la eficiencia energética y la integración regional son temas
prioritarios para los líderes africanos.
"La
importancia percibida del carbón ha bajado dramáticamente. Esto no
quiere decir que África pueda cambiar las cosas de un día para otro,
pero es relevante que los líderes energéticos en el continente vean
oportunidades más allá de las formas de energía tradicionales", apunta
Frei.
El secretario general del WEC considera también
que las renovables son una buena respuesta a la explosión demográfica
que experimentará África en las próximas décadas, según los expertos.
"A pesar del crecimiento de población en estos últimos años", apunta,
"cada año, de media, la falta de acceso a la energía se reduce en 50
millones (...) Esto es, obviamente, una indicación de que la tecnología
ayuda".
Sin embargo, las renovables también acarrean
costes medioambientales con los que hay que ser "muy cuidadosos",
advierte Frei, pero ninguno tan urgente como el cambio climático y la
necesidad de abandonar progresivamente el uso del carbón.
"La única energía limpia que conocemos es la que no se consume, todas
las demás son sucias, incluso las renovables. Ahora, tenemos que
asegurarnos de que optamos por las menos problemáticas", subraya.
No hay comentarios:
Publicar un comentario