BRUSELAS.- El presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi,
transmitió este viernes a los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión
Europea (UE) que la probabilidad de una recesión en la zona es
"bastante baja", pese a la situación de debilidad e incertidumbre
económica.
"Observamos una debilidad prolongada e incertidumbre
generalizada, pero no recesión. La probabilidad de recesión es todavía
bastante baja", dijo Draghi a los líderes en la segunda jornada de su
cumbre europea, según fuentes europeas con conocimiento de la discusión.
El
jefe del emisor de la eurozona atribuyó la situación sobre todo a la
importante ralentización del comercio internacional, pero señaló que,
hasta el momento, el efecto sobre la demanda interna, el consumo y la
inversión, es "limitado".
Defendió que esta situación implica que
debe mantenerse la política monetaria del BCE que, a principios de
marzo, pospuso hasta 2020 la primera subida de tipos de interés desde
2011, debido al debilitamiento económico, y anunció nuevas inyecciones
de liquidez hasta marzo de 2021 para que los bancos presten a empresas y
hogares.
En cuanto al "brexit", Draghi afirmó que el impacto para
la economía de la eurozona en general debería ser "limitado", incluso
en un escenario de salida del Reino Unido sin acuerdo, porque los
diferentes actores deberían estar preparados para esta hipótesis.
El
BCE considera que tanto los bancos centrales como las autoridades
europeas están listas para este escenario, pero advierte, como ya ha
hecho en los últimos meses, de que el sector privado aún tiene que
acelerar los preparativos.
Draghi señaló también que algunos
Estados miembros se verán más impactados por el "brexit" que otros,
aunque no se refirió a ninguno en particular durante la reunión, según
las citadas fuentes.
De acuerdo con éstas, entre los países
potencialmente más impactados estaría también Alemania, dado que roza el
crecimiento cero después de que su economía se contrajese un 0,2 % en
el tercer trimestre de 2018 y no avanzase nada en el cuarto trimestre.
Esto la sitúa en una situación más frágil que otros países con mayores tasas de crecimiento como España.
Draghi
participó en la segunda jornada de cumbre europea para informar a los
líderes sobre la situación económica, pero no tomó parte en el debate
posterior sobre cómo reforzar la base económica de la UE y las
relaciones de ésta con China.
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