PARÍS.- Varios miles de argelinos se concentraron este domingo en el centro
de París para exigir al presidente de su país, Abdelaziz Buteflika, que
no se presente a un quinto mandato y que dé paso a un nuevo régimen
democrático.
En un ambiente festivo y reivindicativo, integrantes -en su mayoría
jóvenes- de la diáspora argelina en Francia se unieron a las protestas
que desde hace semanas recorren su país de origen.
La comunidad argelina en Francia es una de las más numerosas: en las
elecciones de 2014, más de 800.000 argelinos estaban registrados en
Francia para poder votar.
"El pueblo quiere la caída del régimen" o "No habrá un quinto
mandato para Buteflika", fueron algunos de los eslóganes más coreados
por los presentes, entre los que había muchas mujeres.
Una de ellas, que se identificó como Kamilia, consideró que "el pueblo argelino ya no es adolescente, es
adulto, y ya no quiere la tutela del FLN", el partido de Buteflika.
"Siento mucha emoción y orgullo al ver a tanta gente aquí. Toda la
diáspora argelina en el mundo, porque Argelia está en todo el mundo,
apoya al pueblo. Alcanzaremos nuestro objetivo con fervor y con
pacifismo", añadió.
Enarbolando banderas argelinas y bereberes, así como carteles en los
que advertían a Buteflika de que "El juego se ha acabado" ("Game
over"), los presentes mostraban su confianza en que el presidente acceda
a no postular a un nuevo mandato, aunque reconocían que el futuro más
cercano es incierto.
El plazo para la presentación de candidaturas concluye esta
medianoche y se desconoce si el presidente, que se encuentra ingresado
en un hospital de Suiza, entregará su expediente a través de un
representante.
Para Nadia Kashbia, la protesta tiene el objetivo de decirle al
régimen que "ya basta, se acabó, ¡stop! Queremos abolir el código de la
familia, que coloca a la mujer en un nivel inferior legalmente".
"Hay una revuelta profunda, pero también una gran prudencia. Los
argelinos tenemos mucha experiencia en revoluciones y movimientos de
desorden, y hoy hay una gran prudencia popular y de las elites, que
están comprometidas. Conviene que esta prudencia tome el poder, que
hagamos tabla rasa de este sistema que ha contaminado el país y que se
instaure una meritocracia", añadió.
Al mismo tiempo que en París, miles de estudiantes volvieron a salir
hoy a las calles de Argelia para protestar contra la candidatura de
Buteflika.
La precaria salud del presidente de Argelia, quien está siendo
tratado en un hospital de Ginebra, sigue rodeada de misterio, mientras
en su país continúan las protestas para exigir que no se presente a las
elecciones del próximo 18 de abril para un quinto mandato.
El líder político, de 81 años y que dirige la mayor nación africana
desde 1999, sufrió un infarto cerebral en 2013 y desde entonces ha
reducido al mínimo sus apariciones en público, lo que genera cada vez
más rumores sobre su salud.
Desde hace un lustro no realiza viajes oficiales al extranjero y en
los dos últimos años ha cancelado en el último momento por "recaídas de
salud" reuniones con dignatarios como la canciller alemana, Angela
Merkel, o el príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohamad bin Salmán.
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