BRUSELAS.- El
proceso de selección de nuevos líderes para las principales
instituciones de la Unión Europea se verá obstaculizado en la cumbre el
martes, luego de que las elecciones regionales y nacionales dejaron a
muchos líderes debilitados o al mando de gobiernos provisionales.
Para
dos de los contendientes a la presidencia del Banco Central Europeo,
estos desarrollos podrían significar que pierden una oportunidad única.
Erkki Liikanen y Olli Rehn de Finlandia probablemente no se presentarán
en Bruselas, ya que su país ha sido gobernado por una administración
provisional desde las encuestas nacionales del mes pasado.
Si
bien las conversaciones para armar una coalición están apenas
iniciando, aún tomará días o semanas antes de que el gabinete se
posesione oficialmente. Entretanto, el gobierno del exprimer ministro
Juha Sipila solo puede encargarse de los asuntos de rutina y tiene
restricciones para realizar nuevas propuestas políticas.
Los
dos gobernadores del banco central finlandés, Rehn lidera el banco
central nacional y Liikanen es su antecesor, también podrían perder un
aliado potencial.
Austria, que podría haber respaldado a un candidato de
compromiso para el BCE a fin de evitar un enfrentamiento entre Alemania
y Francia, podría estar representada en la cumbre del martes por un
líder interino sin un mandato que pueda presionar y exigir elecciones
específicas.
Sebastian Kurz y su gabinete fueron expulsados el lunes
después de que un escándalo lo despojara de su antiguo socio de la
coalición.
El
presidente de Austria ahora tiene que nombrar un gobierno interino,
aunque eso tomará unos días. Si Kurz asiste a la cumbre del martes como
canciller, no tendrá la autoridad para hacer tratos.
Varios
otros decisores clave de la reunión del martes serán los fracasados, ya
sea porque están enredados en largas conversaciones de coalición
después de una elección, como Bélgica; porque se enfrentan a próximas
elecciones, como Dinamarca; o porque está debilitado por las
consecuencias de los resultados de la catastrófica elección al
Parlamento de la UE.
El
primer ministro griego, Alexis Tsipras, tiene previsto convocar una
votación rápida para fines de junio después de una aplastante derrota
por la oposición en las elecciones de la UE. El gobierno de Rumania está
en caos, su líder de facto ha sido condenado a tres años y medio de
prisión por corrupción.
Con
tantas piezas que aún no están en su lugar, varios funcionarios de la
UE dijeron que las posibilidades de un avance en la cena de la cumbre el
martes son escasas.
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