TIRANA.- El presidente albanés, Ilir Meta, ha anunciado poco antes
de que se iniciasen las protestas en la capital del país, que había
decidido cancelar los comicios locales del próximo 30 de junio, ya que
la situación política tras cuatro meses de protestas «no permitiría la
celebración de elecciones justas» y ha culpado a esta crisis de socavar
«todas las posibilidades de iniciar conversaciones de adhesión con la
Unión Europea».
Miles de seguidores de los partidos opositores de
Albania han salido a la calle, un sábado más, en una manifestación
violenta en donde la oposición ha lanzado bengalas a la Policía que, a
su vez, ha respondido con gas lacrimógeno, para exigir que se celebren
unas elecciones justas y anticipadas y pedir al primer ministro del
país, Edi Rama, que dimita.
Cuatro meses después de que comenzasen
las protestas, los manifestantes se han alegrado cuando el líder de la
oposición y presidente del Partido Democrático de Albania, Lulzim Basha,
ha dicho que las elecciones locales del 30 de junio habían sido
canceladas por decreto presidencial.
«Nuestra batalla continuará
hasta que se produzca la dimisión de Edi Rama», ha destacado Basha al
clausurar su octavo mitin nacional celebrado desde febrero, cuando
dirigidos por su formación política, 65 diputados de siete partidos de
la oposición renunciaron y se unieron a la protesta.
Rama llegó al
poder en las elecciones de 2013 y ganó la reelección cuatro años más
tarde. En principio, los próximos comicios parlamentarios están
previstos para 2021, aunque los socialistas tendrían que pasar antes la
prueba de las elecciones locales de este mes de junio que han sido
canceladas.
A pesar de los intentos por parte de la Unión Europea y
Estados Unidos de animar a ambas partes a entablar conversaciones para
superar este estancamiento, las dos partes se han mantenido firmes en
sus posiciones y no han llegado a ningún acuerdo.
La Unión Europea
ha ido retrasando las conversaciones para la adhesión de Albania
debido, entre otras cosas, a la persistente inestabilidad política, la
falta de reformas y el débil Estado de derecho, que tiene su reflejo en
la calidad de las elecciones. No obstante, la Comisión ha instado al
Consejo Europeo a que inicie las conversaciones de adhesión de Albania y
Macedonia del Norte cuando se reúna a finales de este mes.
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