BRUSELAS.- Un acuerdo alcanzado entre varios líderes europeos clave para darle a un excanciller holandés el puesto de jefe ejecutivo de la UE colapsó en una cumbre de emergencia el domingo después que miembros de Europa del Este y de la centroderecha rechazaran el plan.
El político socialista holandés Frans Timmermans parecía ser el
favorito para reemplazar a Jean-Claude Juncker como presidente de la
Comisión Europea después que los líderes de Alemania, Francia, y España
acordaran respaldarlo mientras estaban en Japón esta semana.
Pero
se encontraron el domingo con una inesperada fuerte oposición de parte
de Polonia, Hungría, República Checa y Eslovaquia. La cena de la cumbre
se inició tres horas tarde después de que se alargaron las reuniones
bilaterales para encontrar una solución.
El punto muerto subrayó
el problema más amplio de toma de decisiones que enfrentan los 28
gobiernos de la UE, que provienen de una serie de grupos políticos y que
han tenido problemas para responder a una serie de crisis en los
últimos años que van desde la inmigración a la economía.
La
cumbre es el tercer intento para cubrir los cinco puestos más
importantes de la Unión Europea para los próximos cinco años, forjando
una política para 500 millones de europeos desde noviembre.
Los
líderes de la UE también debían elegir al próximo presidente del Banco
Central Europeo, pero la decisión parece que será pospuesta por falta de
consenso.
“Ha
habido una revuelta de centroderecha contra Timmermans. Mantienen su
decisión”, dijo un funcionario de alto rango de la UE en la cumbre.
El
Partido Popular Europeo (EPP por su sigla en inglés) dice que ganó la
mayoría de los escaños en las elecciones europeas de mayo y, por lo
tanto, bajo el candidato principal del bloque, o el proceso
Spitzenkandidat, merece el cargo del presidente de la Comisión. Su
elección es Manfred Weber, un legislador alemán de la UE.
“La
gran mayoría de los primeros ministros del EPP no cree que debamos
renunciar a la presidencia tan fácilmente, sin dar pelea”, dijo a
periodistas el primer ministro de centroderecha de Irlanda, Leo
Varadkar.
Eso fue a pesar de la decisión de la canciller alemana,
Angela Merkel, quien lidera el bloque EPP pero que ha visto debilitado
su poder político.
Los liberales y socialistas liderados por el
mandatario francés Emmanuel Macron y el presidente del gobierno español
Pedro Sánchez, afirman que rechazan lo que ven con una creciente domino
alemán en Bruselas y quieren centrarse menos en la austeridad financiera
y más en temas como el cambio climático y un aumento del salario
mínimo.
Pero los líderes de Europa del Este en la cumbre
afirmaron que se oponían a Timmermans, quien en su actual rol como
vicepresidente de la Comisión ha acusado reiteradamente a Polonia y
Hungría de violar derechos civiles.
“Me
temo que esta persona no es realmente la indicada para unir a Europa”,
dijo a periodistas el primer ministro checo, Andrej Babis.
Para
ser nombrado, el próximo presidente de la Comisión necesita el respaldo
de al menos 72% de los 28 estados miembros, que deben representar al
menos al 65% de la población de la UE.
No hay comentarios:
Publicar un comentario