BERLÍN.- Los ministros de Economía
alemán y francés anunciaron este martes una estrategia industrial común
para la Unión Europea (UE), con el objetivo de crear "nuevos campeones"
industriales, como Airbus y tras la fracasada fusión Siemens-Alstom.
"Es
un día importante ya que, luego de meses de trabajo, nos pusimos de
acuerdo sobre la definición de una estrategia industrial para Europa,
que propondremos a nuestros socios europeos", declaró el francés Bruno
Le Maire en una conferencia de prensa junto a su homólogo germano, Peter
Altmaier.
Los socios eligieron la producción de baterías eléctricas
como primer proyecto concreto de cooperación, que estará abierto a otros
países europeos.
Alemania destinó un fondo de 1.000 millones de euros, Francia 700 millones, precisó Altmaier.
Berlín y París esperan una respuesta de la Comisión Europea sobre este tema antes del 1 de abril.
"Es
la primera vez en años (...) incluso en décadas, que lanzamos una
iniciativa de esta importancia y que Francia y Alemania se ponen de
acuerdo sobre una estrategia común en materia industrial para el siglo
XXI", aseguró Le Maire.
"Si Europa quiere seguir siendo un motor
industrial en 2030, necesitamos una verdadera política europea", subraya
el memorando propuesto por los dos países, recordando que sólo 5 grupos
europeos forman parte de las 40 mayores compañías del mundo.
Éste
sostuvo que el memorando propuesto con Alemania se apoya en tres
pilares. Apunta primero a la innovación y su financiamiento. Busca luego
modificar las reglas europeas consideradas como de otro tiempo, tras el
fracaso de la fusión Siemens-Alstom.
El documento estima que los criterios de la UE perjudican a las empresas europeas en comparación a sus competidores mundiales.
Hasta
que las reglas no sean las mismas para todos, y mientras "algunos
países subvencionen masivamente sus propias empresas (...) Debemos hacer
lo posible para que nuestros grupos puedan crecer y ser competitivos",
señalan los dos países, que apuntan con esto a China sin citarla.
Proponen
en algunos casos bien definidos permitir que se impugne las decisiones
de la Comisión Europea en materia de fusiones y adquisiciones.
"Queda
claro que Alemania y Francia no van a decidir solos si se deben
modificar esas reglas y cómo", aseguró Altmaier, subrayando que se
necesitará concertarlo con los otros países de la UE, el Parlamento y la
Comisión Europea.
El acuerdo apunta finalmente a proteger mejor a
las industrias europeas, cuya tecnología más avanzada debe seguir
siendo europea, insiste.
Francia y Alemania establecieron
salvaguardias legales para proteger los sectores estratégicos en
particular del apetito de las empresas chinas, recordaron, alentando a
todos los socios de la UE a hacer lo mismo.