"El crecimiento global ha sido levemente más fuerte de lo esperado en la primera mitad de 2010, pero se proyecta una desaceleración temporal durante la segunda mitad de 2010 y la primera mitad de 2011", señala el informe del Fondo.
En relación al endeudamiento de algunos países desarrollados, el organismo advierte de que "pese a algunos avances constatados en 2010, las perspectivas fiscales a medio plazo de las economías avanzadas del G-20 siguen siendo desafiantes".
"Los riesgos para la recuperación se han intensificado. La combinación de riesgo soberano y un sector financiero todavía débil en muchas economías avanzadas plantea riesgos significativos a la reactivación", subraya el Fondo.
Estos temores se basan principalmente en los montos que los Estados de la eurozona deben obtener a corto plazo. "La deuda pública que llega a madurez en las economías vulnerables de la zona euro en el segundo semestre 2010 y 2011 supera los 400.000 millones de dólares", calcula el Fondo.
"Perturbaciones en los mercados de obligaciones del Estado, ya sea a causa del fracaso de operaciones de financiación o a una escasez de capitales en el sector bancario, podrían incrementar considerablemente la presión sobre las finanzas públicas, provocar una pérdida de confianza en los mercados y alentar un nuevo ajuste presupuestario importante en los Estados en dificultades, lo que podría socavar la reactivación mundial", previene el FMI.