NUEVA YORK.- La Bolsa de Nueva York, que se mantiene en su nivel más alto desde el verano de 2008, será sacudida la próxima semana por una nueva ola de resultados empresariales, además de una reunión de la banca central (Fed) y la divulgación de indicadores económicos importantes.
"Tenemos una semana muy grande por delante", señaló Dan Greenhaus, de la firma Miller Tabak. "Habrá un montón de resultados, muchas estadísticas económicas. Con la reunión de la Fed, se dará probablemente un fuerte impulso al movimiento del mercado, en una dirección u otra", agregó.
En la semana que termina, reducida a cuatro sesiones por el festivo, el Dow Jones ajustó su octava semana consecutiva de ganancias y avanzó un 0,72%, para terminar el viernes en 11.871,84 puntos, su nivel más alto desde junio de 2008. En contraste el Nasdaq, de componente tecnológico, cedió un 2,39%, a 2.689,54 puntos, y el índice ampliado Standard & Poor's 500 un 0,75%, a 1.283,35 puntos.
El martes, ambos índices alcanzaron sus niveles más altos desde agosto de 2008 y noviembre de 2007, respectivamente, antes de acumular dos sesiones de fuerte caída.
"El mercado ha sido tal vez demasiado optimista por la temporada de resultados, que agrega volatilidad a los mercados", indicó Dan Greenhaus.
Ante la gran cantidad de resultados, la mayoría mejor de lo previsto, los inversores reaccionaron con tranquilidad ante las malas sorpresas, especialmente en el sector bancario: Citigroup, Goldman Sachs y Bank of America.
Un hecho clave: el S&P 500, seguido por los corredores para hacer sus análisis técnicos, sufrió el viernes su primera caída de más del 1% en dos meses.
"El mercado se vuelve más sensible a los resultados, simplemente porque sube muy alto y muy rápidamente", explicó Gina Martin, de Wells Fargo Securities. "Los inversores están tal vez un poco nerviosos, temen que los resultados no cumplan con las expectativas", agregó.
La próxima semana estará dominada por una gran número de publicaciones trimestrales, incluidos 13 de los 30 valores que componen el Dow Jones, por ejemplo, McDonald's, Boeing y Microsoft.
En el frente macroeconómico, la semana estará llena de indicadores, principalmente el viernes, cuando se dará a conocer una primera estimación del crecimiento de Estados Unidos en el cuarto trimestre.
La Reserva Federal se reunirá el martes y miércoles y probablemente sea confirmada la actual política monetaria. Con la recuperación en aparente aceleración, los inversores esperan los comentarios de la Fed sobre estímulos.
Wall Street también tendrá un ojo puesto en China, donde las espectaculares cifras de crecimiento con una inflación alta, revivieron los temores acerca de una política menos acomodaticia por parte de Pekín.
